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"Dulces y amados. Amados y queridos. Hoy Todo comienza. Principios y finales, se cruzan y sin embargo no se enredan. Finales sin principios, que agradecemos y despedimos para abrirnos, de corazón, a cosas nuevas. Será un año lleno de cambios, sí, un año repleto de sorpresas. Y no hay nada que deban temer de esto, porqué nada de lo que ocurra será ajeno a su necesidad, sino fiel a su auténtica naturaleza. El año de la responsabilidad, como un acto de amor, de liberación: entendida como auto-entrega. El compromiso -¡al fin!- hacia uno mismo, ya no fuera. El año para encontrar los caminos, las grutas secretas, hacia la negada emoción, para aprender a escucharla y reconocerla como maestra. Para comprender al fin el papel que juega en su evolución. Creen espacios de silencio en su vida, busquen momentos de quietud, de introspección. No esperen, ¡creen de forma activa la conexión! Un año lleno de crecimiento, de comprensión, en el que irán encontrando y colocando muchas "piezas" de este gran mosaico que es la creación, que nunca acaba y siempre se reinventa, que se encuentra en constante expansión. Creadores de nuevos mundos son, artifices de la mágia que el Universo les entrega. La responsabilidad trae de la mano la Conciencia y con ella encarnan el Amor. Entréguense al Sentir, en cada peldaño, a cada tramo, y cesará el dolor. Y recuerden siempre, que en este camino de ascensión les asistimos con todo nuestro corazón. Con Amor, María Magdalena" 1 de Enero de 2020 
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 "Saludos infinitos, saludos infinitos llenos de Paz, llenos de Amor. Somos los Arcángeles Uriel y Metatron y nos complace hablar hoy contigo, hablarte directamente al corazón. Sí, deseamos conversar contigo sobre un tema específico: "La misión". Mucho se entiende sobre este aspecto, mucho se ha dicho y en ocasiones nos damos cuenta que la información se mezcla, generando más lío y creando en confusión. Y sin embargo la cuestión os interesa, pues sois muchos los que estáis despertando y en conectando con vuestro origen divino, lo sepáis o no. Sí, deseáis conectar con el propósito, deseáis comprender la razón de vuestra encarnación.
Amadas y amados, tan profundamente amados por toda la creación. No hay misión más grande que vuestros pasos, no hay limites en vuestro potencial de expresión. Y aquello que buscais, aquello que tan intensamente deseais compartir con el mundo, forma parte de vuestro recorrido, ha latido siempre en vuestro corazón. Y comprendemos que en ocasiones estas palabras no os satisfacen, sabemos que suenan huecas ante el juicio imparable de la razón. Pero aquí reside la importancia de este mensaje que con tanto amor te entregamos hoy: La misión requiere coraje, los propósitos responden a llamados profundos vinculados a la autenticidad de quienes sois. No hay misión sin corazón, porqué tu eres tú misión. |
Autora,
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