Despierta la tierra, ruge, florece, bosteza. Se levante el velo que cubría su tez, revive de nuevo siendo simultáneamente joven y vieja . Bosteza la Primavera y con su primer aliento aviva nuestra claridad, despierta nuestra franqueza . La energía nos pide salir, resurgir: manifestarnos hacía fuera, pero el momento que transitamos y su trascendencia clama responsabilidad y conciencia. Que interesante reto tenemos entre manos: conciliar la impaciencia intrínseca de esta época, de la adolescencia, con la calma y sabiduría que necesita la humanidad, tras siglos de experiencia en este planeta. La Vida nos pide calma y el Alma rebotar, entonces: que así sea! Fundamos ambas energías para crear y renacer de una forma nueva. En el día del equinoccio conciliemos las polaridades, abracemos nuestras dualidades como no podría ser de otra manera, revivamos nuestro Ser acompañados por la Luna que mengua. Ostara despierta y nos embriaga de promesas, de sensaciones corporales, revitalizando nuestra esencia. La intrépida doncella que no teme florecer descubriendo el mundo con una mirada nueva. Su verdad es tan bella como honesta, suave su tez, enmarañada y larga su cabellera. Cubierta por una manto de flores y enredaderas resurge de la Tierra despertando con ella. Comparto contigo su Ritual, deseándote un mágico renacimiento allí donde estés, pues nada puede confinar la mágia que nos trae la llegada de la primavera. La energía pide cambio y el cambio ya se manifiesta. El ritual que te facilito consta de tres partes y empieza con una limpieza. Una purificación del plano físico que nos ayudará a renacer y manifestar con mayor fluidez.
Abre las ventanas para que pueda entrar el Aire en tu hogar, invoca a este elemento para que traiga energías nuevas. Permite que el sol de primavera bautice el espacio con sus rayos que cada día irán brillando con mayor fuerza. Quema incienso (floral si puede ser) o sahúma tu hogar acompañando el acto con tu intención en cada habitación: que todo renazca al servicio del mayor bien, que la luz cobre junto al Sol mayor fuerza. Toma un ducha ritual o prepárate una bañera, Recuerda hacerlo con intención: honrar el acto transforma lo cotidiano en una sagrada experiencia. Puedes acompañarte de música, encender unas de velas, agregar algunos pétalos (si tienes la ocasión) en el suelo de la ducha o la bañera. Usar aceites florales disueltos en agua para rociar por encima de tí al terminar la limpieza, sellando la energía de renovación de la experiencia. Por último, crea un pequeño altar en el espacio que tu sientas, poniendo en su centro una vela nueva rodeada por un pequeño círculo de sal y tierra. Si dispones de flores o hierbas agrégalas a su alrededor, creando dibujos con ellas, presente en este acto generador de elevada vibración: belleza. Si no dispones de ellas píntalas o dibújalas tu misma del modo en que tu sientas como sientas. El comienzo de la primavera es una representación de los poderes femeninos generadores así que crea desde tu sentir, expandiendo el poder de este ritual al ser fiel a tu latir. Puedes añadir minerales o piedras que vibren con la energía de esta estación que empieza. Cuando hayas terminado de confeccionar el altar tomate unos minutos para observar su belleza, su fuerza. Respira profundamente para poner tu intención antes de encender la vela, date unos instantes para alinearte con ella. Puedes invocar a Ostara para unir vuestras fuerzas. Enciende la vela, y con tus propias palabras expresa tu intención, que el aire de tu aliento manifiesta. Respira profundamente y siente este momento... Camina descalza la diosa de la Primavera. Sus palmas desnudas van tocando cuanto ve, despierta las flores al rozarlas, susurra a los árboles y su savia renueva. Hermosa y antigua, esta diosa nos recuerda que nuevos comienzos nos esperan, que ésta es nuestra naturaleza. Nos anima a salir al mundo de una forma nueva. La esperanza de renacimiento se manifiesta cuando Ostara emerge sonriente llenándonos de fuerza, llevándose los temores que nos impiden creer en nuestro poder, para que florezca nuestra esencia. Musa para los poetas, fragancia de amor que nos lleva a enloquecer. Despierta nuestras pasiones adormecidas convertiendo en cenizas la timidez. Bella Ostara, te damos la bienvenida, bendice nuestros corazones, llenalos con tu poder. Recuerdanos el vigor que habita en la Tierra y en nosotros a su vez. Libera nuestros corazones, rejuveneciendonos otra vez, para que podamos oir sus canciones y sentir la ligereza de la juventud en nuestro Ser.
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